De muchas formas estaba harta.
Lo amaba, sÃ, pero estaba harta de la forma en que el presionaba.
Se sentÃa tan fuerte, como si sujetara mis brazos hasta poder ver sus nudillos blancos de ira. HabÃa provocado mis últimos tres ataques de pánico y la verdad es que ya ni siquiera me sentÃa segura de querer.
Dice una canción "puedes volverte adicto a cierto tipo de tristeza" pues bien, eso me estaba pasando a mi: me estaba volviendo adicta a esta situación de mierda.
TenÃa ganas de lograr algo lindo y la verdad es que el plan era bastante bueno. El resultado lo visualizaba bien: perfecto, hermoso, emotivo, el gran cierre de la gran noche. Pero claro, a el no le bastaba eso.
Para ser sincera, ya no sabÃa que mierda querÃa obtener de mi.
Asi pasa cuando tienes un buen plan de un gran detalle para alguien cuya mente está enferma.
Asi es cuando ese alguien tiene cualquier clase de porquerÃa en la cabeza.
Dios, me siento tan invadida. Tan violentada.
Quiero llorar.
P.
[No estoy enojada. Estoy herida, esa es la diferencia]
domingo, 28 de abril de 2013
De muchas formas estaba harta.
Lo amaba, sÃ, pero estaba harta de la forma en que el presionaba.
Se sentÃa tan fuerte, como si sujetara mis brazos hasta poder ver sus nudillos blancos de ira. HabÃa provocado mis últimos tres ataques de pánico y la verdad es que ya ni siquiera me sentÃa segura de querer.
Dice una canción "puedes volverte adicto a cierto tipo de tristeza" pues bien, eso me estaba pasando a mi: me estaba volviendo adicta a esta situación de mierda.
TenÃa ganas de lograr algo lindo y la verdad es que el plan era bastante bueno. El resultado lo visualizaba bien: perfecto, hermoso, emotivo, el gran cierre de la gran noche. Pero claro, a el no le bastaba eso.
Para ser sincera, ya no sabÃa que mierda querÃa obtener de mi.
Asi pasa cuando tienes un buen plan de un gran detalle para alguien cuya mente está enferma.
Asi es cuando ese alguien tiene cualquier clase de porquerÃa en la cabeza.
Dios, me siento tan invadida. Tan violentada.
Quiero llorar.
P.
[No estoy enojada. Estoy herida, esa es la diferencia]
Lo amaba, sÃ, pero estaba harta de la forma en que el presionaba.
Se sentÃa tan fuerte, como si sujetara mis brazos hasta poder ver sus nudillos blancos de ira. HabÃa provocado mis últimos tres ataques de pánico y la verdad es que ya ni siquiera me sentÃa segura de querer.
Dice una canción "puedes volverte adicto a cierto tipo de tristeza" pues bien, eso me estaba pasando a mi: me estaba volviendo adicta a esta situación de mierda.
TenÃa ganas de lograr algo lindo y la verdad es que el plan era bastante bueno. El resultado lo visualizaba bien: perfecto, hermoso, emotivo, el gran cierre de la gran noche. Pero claro, a el no le bastaba eso.
Para ser sincera, ya no sabÃa que mierda querÃa obtener de mi.
Asi pasa cuando tienes un buen plan de un gran detalle para alguien cuya mente está enferma.
Asi es cuando ese alguien tiene cualquier clase de porquerÃa en la cabeza.
Dios, me siento tan invadida. Tan violentada.
Quiero llorar.
P.
[No estoy enojada. Estoy herida, esa es la diferencia]