Aveces mis decisiones eran erróneas, y yo lo sabÃa.Supe que no era perfecta, y que esas decisiones algún dÃa me llevarÃan a algo catastroficamente malo.Tal vez no serÃa tan malo, después de todo.Me la pasaba dañando sin intensión.Muchas veces me desperté en medio de la noche, con una sensación de soledad que me asfixiaba y me enmudecÃa. Además de eso, tengo que remarcar la extraordinaria capacidad que tenÃa de dañarme a mi misma, y de meterme en problemas.Un problema me llevaba a otro, y ese problema a su vez me metÃa en diez más.
Con el tiempo, fui tomando prioridades, abandonando metas, luchando por la ley de la supervivencia.llegué al punto de creer que mejorar era una opción, no una regla, de creer que se podÃa vivir siempre a mediación de todo, siempre sumida en la mediocridad.
La realidad es que estaba caminando, en cÃrculos y con el rumbo perdido.
Entonces decidà encontrarme aunque en el trayecto tuviera que perder un montón de cosas más. Después de todo, los amigos se iban, algunos por decidión propia, algunos más por muerte, enfermedad, situaciones de la vida que una persona no puede controlar. Los amores y amantes iban desapareciendo, uno a uno. Por decición propia, por convicción, por metas, por huir.
Todo y todos se iban, uno a uno. Asà que al final de todo solo quedaba yo.
QuerÃa encontrarme, tenÃa que hacerlo.
Entonces comenzó el dÃa uno de la operación autorescate. El inicio de sepa el cielo cuantos inicios más habrÃa que tomar. habÃa decidido recorrer el camino con valentÃa, con audacia, con temor... con todo lo que implicaba ser yo.
Porque me habÃa cansado de ser alguien más que nunca fuÃ.
Cabe señalar que escribo desde la escuela, sentada en el laboratorio de computo, con el frÃo quemandome la sangre debajo de la piel! D: